En la plaza el alboroto, un extraño
orgullo cala sus huesos blandos
Espera en la celda, la piedra
gotea, el tiempo se alarga siglos
Su corazón bombea rápido podría
subir una montaña a ese ritmo
No hay edad. Nada en abundancia
de moscas, resín y harapos
No siente el peso de los grillete
El cuerpo flojo de no comer pasteles
en platos de oro
Las perlas le sirven de rosario
Cierra los ojos y parece que lo hiciese
por última vez
La saliva sabor maquillaje
Los ojos se llenan de lágrimas
Los pasos de los verdugos
El bamboleo de brazos fornidos
y guantes negros
El Mago hará su truco sin vuelta atrás
La Picadura sin antídoto
Será como nuez su cuello.
Será como un collar la guillotina
Antes de caer, se arrepintió a pesar
de ser inocente.
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